Día 24 de Octubre de 1809.

Santoral: oficio de D. José Viader de fecha 16: y un aviso al público.

Dicho oficio va precedido de los párrafos siguientes:-- "No quedará á Gerona prueba alguna que dar de su fidelidad, patriotismo, entusiasmo y religion; su valor lo tienen tan manifestado que todos los proyectos del enemigo se reducen á ser espectadores y al mismo tiempo admiradores, de la constancia de este heroico pueblo, digno ciertamente de la gratitud de toda la nacion, no solo por los exemplos que en él se dan de firmeza y bizarría, sinó por que á costa de fatigas, de penas y privaciones, tiene como amarrado y entretenido medio año há un exército, cuyos progresos sin la existencia de Gerona serian sin duda tan funestos como incalculables.

"El fuego del patriotismo, este precioso elemento que produce efectos tan prodigiosos en Gerona, ha borrado ya hace tiempo las preocupaciones de la educacion. Ambos sexos desprecian los melindres de las almas serviles y prefieren qualquier alimento á los regalos y abundancia que gozarian, si pudiesen por un momento olvidarse de ser españoles y vasallos de Fernando VII.

"Aviso al público.-- Mañana 25 del corriente se satisfarán en la Pagaduría del Misniterio de Real Hacienda y Guerra de esta Plaza, las libranzas número 1.º hasta el 12 inclusive, de los caballos consumidos en el abasto de carnes de esta Ciudad, y se prevendrán en esta misma forma para noticia de los interesados las entregas sucesivas á su debido tiempo".

Sucesos del sitio.

La guerrilla de D. Antonio Pol condujo á la plaza tres cadáveres hallados debajo de Palau Sacosta. Eran de un religioso y dos paisanos que intentando sin duda el paso fueron asesinados por los enemigos. Con este motivo el Diario de Gerona del 26 decía: "Uno de ellos tenía 22 heridas casi todas mortales, el otro 20 de igual clase y el religioso las mismas poco más ó menos. Es decir que la barbarie de estos caníbales dio la mayor parte de sus golpes á los cadáveres y no á cuerpos vivos; los golpes que tienen recibidos en la plaza quieren vengar cobardemente en unos infelices ya muertos de las primeras cuchilladas: estos son los humanos, estos los que nos convidan con la felicidad; al menos nos enseñan con tales escenas lo que nos podemos prometer de sus engañosas sugestiones.

"Breve persuasiva contra el pernicioso escrupulo de comer carnes saludables que presenta al público el Consultor de Cirujía D. Juan Nieto Samaniego.

"No obstante el resultado de la consulta celebrada de orden superior sobre el uso de las carnes de caballo como alimento, que citó y dio al público mi amigo y compañero el consultor D. Joseph Viader, en el papel diario de esta ciudad del 9 de octubre, y su oficio sobre el mismo objeto inserto en otro de 24 del mismo, se advierte todavía algun nocivo escrúpulo en el uso de este excelente alimento; tal es el imperioso dominio de la costumbre que acaso se empeña en sostener y propagar alguno, cuya cobardía y horribles maquinaciones le ponen en el caso de sentir vivamente que se hallen recursos para llevar á colmo nuestra gloria en la prodigiosa defensa de esta plaza.

"Deseando oponerme á uno y otro y dexando aparte autoridades y la pomposa erudición, para abrazar la sana teoria que conforta y sostiene la maestra experiencia, tentaré si puedo lograr que llegue á ser util mi discurso á la salud y comodidad pública; y de consiguiente á la grande obra de la defensa en que nos hallamos tan gloriosamente empeñados.

"La materia que nutre al hombre, es, precisamente la misma de que consta, y quanto más análogos son los principios que constituyen su alimento á su misma substancia, tanto mas facil, abundante y grata en la subsequente nutricion que le ofrecen en sentido fisiológico, y vice-versa. Tengo por superfluo el probar aquí lo que nadie ignora, y es: que el hombre es animal carnívoro, hervivoro y granivoro; esto es que se alimenta de carne y de vegetales, sean semillas, hojas, tallos, raizes y frutas, y que los recursos de su existencia son en la naturaleza en razon directa de sus necesidades: contémplese si son escasos!

"Si recorremos por la análisis las substancias simples que sirven de materiales á la maravillosa fábrica del hombre, hallamos la tierra caliza, mucho azoe, amoniaco, carbono, hidrogeno, oxigeno, hierro, alkalis, azufre, etc. y entre las compuestas, muriate de sosa, fosfates calizos, ácido fosfórico y otras: y del conjunto de tanto principio, combinado de diferentes modos y dotado de la recóndita y admirable virtud orgánica con que le enriquece el Criador, se forman y configuran los huesos, cartilagos, ligamentos, arterias, venas, nervios, músculos, vísceras, membranas y otras partes sólidas; después, en estado más ó menos líquido, el quilo, sangre, linfa, lágrimas, saliva, bilis y otros humores, con algunos fluidos aeriformes.

"Estos mismos principios de que consta la parte material del hombre, las mismas variedades de partes sólidas y fluidas, y los mismos fenómenos en las funciones vitales y naturales, forman tambien los brutos y se celebran en ellos, teniendo nosotros entre otras cosas esto de comun con los irracionales.

"La observación enseña que usa el hombre por natural instinto y apetito, de la carne de animales de sangre roxa y caliente, con preferencia de las otras, aunque no las excluya, y que prefiere los quadrúpedos que le son más inmediatos y comunes.

"Estos, teniendo en si la innata virtud de asimilar á su sustancia y animalizar las materias vegetales de que sacan su nutrimiento, sirven para el hombre como de laboratorio, destinado á formarle y ofrecerle la carne suculenta, pingüe, alimenticia y agradable que le es tan necesaria considerado en sociedad: cumpliendo, no menos en esta obra que pasivamente executan, que en los usos mecánicos, económicos y cómodos, el precepto del Criador, de que estuviesen sujetos al hombre, sirviéndole para aliviar sus necesidades y fatigas.

"La carne de estos animales es sin duda uno de los mejores alimentos del hombre, por que lleva en si reducidos á poco volumen los mismos principios de que consta.

"Daré aquí una idea de la maravillosa virtud de la nutrición, para manifestar esta verdad que quieren sofocar con algunos fanáticos antiguos, los escrúpulos del día.

"El arte y la naturaleza, llevan las substancias nutricias al mayor grado de división, por el guiso, masticacion, menstruos de bebida, saliva, humor gástrico, etc., por la maceración, cocción y trituración que sufren en el estómago: pasan luego en forma pastosa á los intestinos donde reciben la bilis, humor pancreático y nueva trituración y en este canal alimentario chispan las venas lacteas, el quilo, segregando todo lo indigesto en heces: conducente á la sangre no lexos del corazon, desde este músculo pasa al pulmon donde recibe el oxígeno del ayre y pasa despues por las arterias, á todas las partes del cuerpo.

"En todo este vasto y precipitado círculo, va ofreciendo la sangre, acaso en forma gaseosa, á todas las partes su nutrimiento; y ya sea por una especie de instinto insito en los órganos, ó por la ley de afinidad que tienen entre sí los cuerpos símiles, atrae á sí, asimila y animaliza el hueso, el cartílago, el músculo, la víscera, etc., las partes que le son similes, propias y necesarias, para reponer sus pérdidas y para tomar movimientos en edad oportuna.

"De consiguiente, se hace manifiesto que quanto mayor dosis de partículas nutritivas lleve en sí la sangre, tanto mejor se nutre el hombre; y prosiguiendo la ilacion; habiendo de formarse la sangre de las citadas substancias, será más copiosa y fácil su formación, cuanto sean más símiles y análogos al hombre los alimentos que tomó previo el estado de salud.

"Entre los brutos de que hablé arriba y que se hallan más abundantes é inmediatos al hombre, se cuentan el buey, el caballo y sus especies, el mulo y jumento… Si no debiera ceñirme á ciertos límites, me sería fácil traer aquí exemplos de que quasi todos los animales terrestres de sangre roxa, los anfibios, aquaticos y volátiles de nuestras regiones, habiendo servido de alimento algunas veces á los hombres, han dado pruebas nada equívocas, de ser idóneos para este tan útil uso.

"Sentado el principio de que aquellos animales suministran carnes que concilian la salud con el gusto, como consta de la experiencia, no solo en la historia de las guerras, asedios y penuria de víveres que han sucedido hasta ahora, sinó también entre nuestros enfermos en los hospitales y casas particulares, como igualmente en los quarteles, pues es evidente que desde que se usan estas carnes, enferman menos y convalecen mejor; que motivos fundados hay y quedan para abrigar el pernicioso escrúpulo que priva á muchos de este precioso manjar que tanto alivia nuestra lastimera situación?

"Se dirá no obstante esto, de comun consentimiento no se han admitio en nuestras tierras estas carnes y que para ello debe haber algun fundado motivo oculto. Procuraré satisfacer esta objeccion.

"Si se recurre á las leyes y bandos de policia, se vé que jamás han prohibido el comer estas carnes, por motivo de no ser saludables; ni era regular el prohibirlas, pues que la medicina las abraza y aconseja á la faz del universo en varios casos, ya ha más de veinte siglos.

"La Biblia, agusta fuente de sabiduria, es cierto que en los libros de Moysés prohibe comer carne de animales que no tengan la uña hendida, con absoluta exclusion del cerdo, la sangre de todo animal y el pescado que no tenga escama; pero no obstante, está autorizado por la Santa Iglesia en el transcurso de muchos siglos y por el consentimiento comun de los hombres, el uso de los pescados sin escama, el del cerdo, de los animales de uña no hendida y la sangre.

"Es lo más probable y para mi evidente, que la causa de no haberse admitido para uso comun alimenticio, las carnes de que se trata, sin embargo de sus bellas cualidades, consiste en una especulacion lucrativa y económica de los hombres, llevada más allá de los debidos límites. Siempre dispuesto el hombre á obedecer, y aun á dexarse dominar de los impulsos del interés y comodidad, conoció el gran lucro y ventajas que le ofrecian los extensos y multiplicados usos para que son aptos estos cuadrúpedos, en los oficios de la agricultura, en la guerra, luxo, etc. Comparóles con los del buey y halló que todas las ventajas de este se las proporciona con imponderabl exeso el caballo, mulo y el jumento, dedicándolos en fuerza de su aptitud á innumerables oficios á que no puede servir ó no ha servido el buey.

"Entró también en sus cálculos y especulaciones la fecundidad de cada género y el coste de su nutrimiento, y halló más facilidad y menos coste en criar bueyes, ovejas, cabras y cerdos, que caballos, mulos y jumentos; y de consiguiente prevaleció la economia y justa preponderacion de aprecio de estos, reservándolos para usos á que no pueden concurrir los otros, por lo que fueron aquellos destinados al matadero y los otros á ser domésticos y coadjutores de los oficios y comodidades de los hombres.

"Replicaran acaso; por que cuando cesan de ser útiles se abandonan y arrojan al muladar? Por solo no estar en uso el comerlos cuando se inutilizan de desgracia, es decir, por la fuerza de la costumbre que tan poderosamente domina al hombre, y por que cuando llegan á ser desechados por viejos, están enfermos, excarnes y de ninguna utilidad para alimento.

"Según lo que queda establecido, no sobre vagos fundamentos, y las juiciosas y eruditas reflexiones que sobre este mismo objeto ha hecho mi citado conprofesor D. Josef Antonio Viader, para que se haga uso provechoso de las carnes de caballo, mulo y jumento, animales mucho más nobles, puros, limpios y hermosos que otros de que comemos, y que los gatos y ratones de que vamos dando fin, solo nos queda que vencer una envegecida costumbre.

"A este efecto, tenemos en nuestra ayuda el poderoso auxilio de la total carencia de otras carnes, legumbres, vinos, frutas y verduras, de suerte, que apenas nos queda más que un poco de pan; y si fuese necesario algun estímulo vendrá á nuestro socorro el agudo apetito.

"Hablase, y se pretende persuadir á algunos de los nobles hijos de la invicta ciudad y á los grandes y aguerridos defensores de ella; esos heroes, que tantas veces han logrado estrellar contra los muros á los más formidables enemigos con las armas, no es dable que venzan mejor con la reflexion un pernicioso escrúpulo, enemigo de sus glorias, que está solo apoyado sobre la caduca costumbre.

"Cada uno de los adagios de la grave y fecunda lengua española, es una sentencia inconcusa; valgámonos de uno que viene al caso: carne, cria carne; alimentémonos pues de ella, para conservar y restituir á nuestros guerreros el vigor de sus fatigados miembros, la robustez y energía de que aun necesita la grande obra de defender nuestra ciudad.

"No es nuevo el uso de estas carnes en los famosos gerundenses; con ella se alimentaron sus antepasados, cuando en tan apurada situacion como en la que nos vemos, se cubrían de inmortal gloria, sepultando en sus campos y en el contorno de sus muros, más de ciento y cincuenta mil de sus sitiadores, ascendientes de los que ahora nos oprimen.

"Comamos de este saludable alimento, para que superando al enemigo, sin ser vencidos del hambre, podamos luego coger el fruto, el copioso fruto con que quiere retribuirnos la admirable patria, coronando nuestros sacrificios y paciencia; y que en torno del heroe que nos guía y conduce á la libertad y á la gloria, cantemos himnos de gracias á nuestro generalísimo y patron San Narciso.

"Gerona 24 de Octubre de 1809.-- Juan Nieto Samaniego.-- Excelentísimo Sr. D. Mariano Alvarez".

Noticias del Gobierno.

En este día D. Martín de Garay secretario de estado, decía, al Ministro encargado de negocios cerca de Austria, lo siguiente:

"El exército que tenemos en Cataluña se compone de 20 mil hombres, todos veteranos, con cuya fuerza y la que se está organizando en Valencia, no es facil que por aquel lado puedan hacer progresos los enemigos, los quales se hallan muy ocupados en el sitio de Gerona. Esta ciudad lleva ya cerca de cinco meses de sitio, y no obstante de que todas las obras exteriores que defienden la plaza se hallan arruinadas, que tiene tres brechas practicables para veinte hombres de frente, y que ha sufrido ocho asaltos con horrible pérdida del enemigo, continua en su defensa con el mismo teson y ardor que al principio, y siendo siempre el terror de las legiones del tirano".

En 26 dijo lo mismo al ministro plenipotenciario en Inglaterra Don Juan Ruiz de Apodaca y al Ministro secretario de Estado de aquella nación Lord Wellesley.




Infanteria Lleugera. Fuseller del Batalló de Girona. Dibuix de Fèlix Xunclà. Basat en "Uniformes Militares Españoles. El Ejército y la Armada en 1808", de José Maria Bueno, Málaga, 1982.



Infanteria Lleugera. Fuseller del Batalló de Voluntaris de València. Dibuix de Fèlix Xunclà. Basat en "Uniformes Militares Españoles. El Ejército y la Armada en 1808", de José Maria Bueno, Málaga, 1982.



Infanteria Lleugera. Fuseller del Batalló de Campo Mayor. Dibuix de Fèlix Xunclà. Basat en "Uniformes Militares Españoles. El Ejército y la Armada en 1808", de José Maria Bueno, Málaga, 1982.



Infanteria Lleugera. Fuseller del Batalló de Navarra. Dibuix de Fèlix Xunclà. Basat en "Uniformes Militares Españoles. El Ejército y la Armada en 1808", de José Maria Bueno, Málaga, 1982.



Infanteria Lleugera. Fuseller del Batalló de Caçadors de Barbastre. Dibuix de Fèlix Xunclà. Basat en "Uniformes Militares Españoles. El Ejército y la Armada en 1808", de José Maria Bueno, Málaga, 1982.


Bibliografia.

Extret de "Reseña histórica de los Sitios de Gerona en 1808 y 1809". Emilio Grahit y Papéll, Imprenta y libreria de Paciano Torres, Gerona. 1894.


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